Cuando pensamos en el diseño del baño, nuestra atención suele centrarse en la elección de los azulejos, los colores de las paredes o el estilo de la grifería. A menudo pasa desapercibida, aunque no por ello menos importante, la correcta planificación de la distancia entre centros de la grifería. Una que no solo armonice con la estética del espacio, sino que también garantice funcionalidad y confort de uso. Podríamos pensar que se trata de un mero detalle técnico, pero en la práctica tiene un impacto directo en cómo percibimos el espacio y en lo eficazmente que lo utilizamos cada día. También es determinante al elegir la grifería de baño adecuada. Vamos a analizar esta cuestión de cerca.
Cuando pensamos en el diseño de un cuarto de baño, nuestra atención suele centrarse en la elección de los azulejos, los colores de las paredes o el estilo de la grifería.
A menudo se pasa por alto, aunque no es menos importante, planificar correctamente la distancia entre ejes de la grifería. Una que no solo armonice con la estética del espacio, sino que además garantice funcionalidad y comodidad de uso. Podría pensarse que se trata de un simple detalle técnico, pero en la práctica influye directamente en cómo percibimos el espacio y en lo eficientemente que lo usamos cada día. También tiene peso a la hora de elegir la grifería de baño adecuada. Analicemos este tema más de cerca.
En el mundo del diseño de baños hay muchas tendencias y enfoques individuales, pero cuando hablamos de aspectos técnicos, como por ejemplo la separación de las tuberías, parece que la existencia de un estándar nos facilitaría la vida a muchos.
Y, de hecho, existen algunas directrices universales sobre las distancias que se aplican de forma general en el sector. Aunque distintos modelos de grifería pueden tener requisitos ligeramente diferentes, la mayoría de los fabricantes se basan en normas establecidas para facilitar la instalación y garantizar la compatibilidad con las instalaciones existentes.
La distancia estándar para la grifería de baño, tanto de ducha como de bañera, suele ser de 150 mm. Esto significa que la separación entre los dos orificios destinados al montaje es exactamente de 15 centímetros. Este valor está aceptado por la mayoría de los fabricantes, lo que facilita sustituir la grifería sin tener que intervenir en la instalación existente. No obstante, conviene señalar que algunos modelos modernos de grifos de baño, especialmente los de diseño más vanguardista, pueden presentar otra medida.
Siempre merece la pena comprobar con detalle la especificación del producto elegido y ajustarse a sus requisitos para evitar sorpresas durante el montaje y asegurar el funcionamiento óptimo de la grifería.
Durante la reforma del baño también puedes encontrarte, aunque con menos frecuencia, separaciones de tuberías más atípicas para la grifería:
Al elegir la grifería del baño no solo importan los aspectos técnicos. Igual de importante es que la grifería de baño se integre a la perfección en la estética del interior, garantizando al mismo tiempo durabilidad y comodidad de uso.
Si vas a apostar por proyectos contemporáneos, conviene buscar aquellos que combinen soluciones tecnológicas innovadoras con un diseño único. Así, el baño se convertirá no solo en un lugar de rituales diarios, sino también en un oasis de relax y elegancia, donde cada elemento decorativo desempeña un papel importante en la creación del concepto global del espacio.
De especial importancia desde el punto de vista del diseño es la grifería de ducha, ya que la forma de la alcachofa influye en la comodidad de uso no solo al lavar el cuerpo, sino también el cabello e incluso las mascotas. Si es demasiado pesada y angulosa puede dificultar que el chorro de agua llegue a las zonas de difícil acceso, por lo que antes de la instalación conviene comprobar cómo se siente en la mano.
Las medidas precisas son la clave para seleccionar e instalar correctamente la grifería del baño. Para evitar errores y sorpresas desagradables, utiliza un calibre o una cinta métrica metálica.
Antes de tomar medidas, identifica los puntos de montaje. En el caso de la grifería de ducha y de bañera, suelen ser dos orificios en la pared a los que van conectadas las tuberías. Si estás en plena reforma y la pared está al descubierto, estos puntos serán fácilmente visibles. Si no, por lo general coinciden con los lugares donde se encuentran las llaves antiguas o los extremos de las tuberías.
Coloca el calibre o la cinta de modo que comience en la parte central de un orificio y termine en la parte central del otro. Anota el resultado exacto en milímetros.
Al invertir en una nueva grifería de baño, recuerda que la armonía entre diseño y funcionalidad se traduce en confort y satisfacción en el uso diario. En lo relativo a la instalación, no dudes en preguntar a los vendedores por los detalles – a menudo ellos disponen del conocimiento necesario sobre la especificación del producto.
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