¿Qué bañera elegir para un baño en la buhardilla?

La buhardilla es una parte intrigante y con mucho encanto de la casa, que destaca frente a otras estancias. Situada en la última planta del edificio y caracterizada por techos inclinados, es un lugar estupendo para instalar un baño. Antes de empezar a planificar la distribución, comprueba qué bañera elegir para el baño del ático para que sea funcional y estética.

Baño con techos inclinados y bañera

La presencia de techos inclinados en el ático obliga a aplicar determinadas soluciones en la distribución del espacio. Todas las funcionalidades del baño deben diseñarse de forma que las pendientes no dificulten el uso de la bañera ni del lavabo. Si el espacio no se aprovecha correctamente, un baño relajante puede convertirse en una obligación desagradable.

¿Cómo aprovechar los techos inclinados?

Una de las soluciones más populares y a la vez más prácticas es colocar la bañera directamente bajo los techos inclinados. Si optas por esta variante, recuerda que la bañera debe ubicarse de manera que entrar y salir de ella sea cómodo. Para ello, hay que mantener al menos 190 cm de altura en el borde de acceso.

Los techos inclinados son un lugar estupendo para almacenar diversos objetos, como toallas y cosméticos. Se pueden diseñar estantes adaptados a la superficie de las paredes y del techo. Otra alternativa es dejar los planos inclinados sin modificar. Gracias a ello, el baño del ático resultará muy espacioso.

¿Qué bañera elegir para el baño del ático?

Al diseñar un baño en el ático, algunas personas optan por una ducha. Sin embargo, si dispones del espacio adecuado, la bañera será la mejor elección. Su altura suele oscilar entre 50 y 60 cm. Para utilizar con comodidad una bañera colocada bajo un techo inclinado, el espacio para la persona sentada debe ser de, como mínimo, un metro de altura. En este caso, la altura se mide desde el suelo. Delante de la bañera hay que dejar aprox. 70 – 110 cm de espacio libre. A su vez, la altura en esta zona de la estancia debería ser de al menos 2 metros para poder ponerse de pie junto a la bañera con total comodidad.

Bañera en el ático con techos inclinados: forma

Las bañeras rectangulares son las más populares. Es una buena elección, pero solo si la bañera no se coloca directamente bajo los techos inclinados o si es muy ancha (de al menos 2 metros). En espacios más pequeños, conviene considerar otra forma.

Últimamente están ganando popularidad las bañeras redondas y ovaladas. Una bañera redonda exenta en el ático puede aportar expresividad y carácter a tu baño. Si cuentas con grandes ventanas de tejado, puedes colocar la bañera redonda en un lugar desde el que disfrutar de unas vistas preciosas durante baños largos y relajantes.

Si te decides por una bañera de forma ovalada, ganarás mayor libertad de diseño. Las bañeras de este tipo pueden ser tanto exentas como instaladas de forma fija. Ten en cuenta que las bañeras ovaladas requieren más espacio que sus equivalentes redondas.

¿Qué material elegir?

Bañera exenta adosada a la pared es un elemento que hará que el baño del ático se convierta en tu estancia favorita de la casa. Sin embargo, para disfrutar plenamente de baños relajantes, elige una bañera fabricada con el material adecuado.

De forma constante, las bañeras de acrílico son las más populares. Es un material sólido y resistente a las decoloraciones. Lo que es importante: el acrílico se caracteriza por un peso muy bajo en comparación con otros materiales utilizados en la fabricación de bañeras. El acrílico también proporciona un aislamiento térmico óptimo. El agua que se encuentra en una bañera acrílica se mantendrá caliente durante más tiempo. Es, sin duda, la mejor elección.

Una alternativa al acrílico es el acero esmaltado. Las bañeras de este material se caracterizan por su alta resistencia a los daños mecánicos. El acero es algo más pesado que el acrílico, pero su mayor desventaja es el pobre aislamiento térmico.

Si buscas soluciones extremadamente duraderas, puedes optar por una bañera de hierro fundido. Es un material fácil de mantener y prácticamente indestructible. Además, el hierro fundido ofrece un gran aislamiento térmico. ¿Contras? Su enorme peso. Las bañeras de hierro fundido son aprox. 8 veces más pesadas que las bañeras acrílicas de las mismas dimensiones.

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